Por: Nancy G. Nieva
Los cuidadores primarios de un enfermo terminal juegan un papel fundamental en el bienestar del paciente y en la calidad de vida que experimenta durante los últimos días de su vida.
Estos cuidadores, que suelen ser familiares cercanos o amigos íntimos, deben estar preparados tanto emocional como prácticamente para afrontar esta difícil etapa.
Por lo tanto, es vital que los cuidadores primarios comprendan la naturaleza de la enfermedad terminal y sus implicaciones.
Esto implica obtener información detallada sobre la condición médica del paciente, las opciones de tratamiento disponibles y las posibles complicaciones que puedan surgir.
Importante entender los síntomas comunes asociados con la enfermedad terminal
Para llevar un cuidado adecuado, es de suma importancia entender y saber los síntomas de la enfermedad de nuestro paciente, como el dolor, la falta de apetito y la fatiga, para poder aliviar sus malestares de una manera más eficaz.
Esto les permitirá comprender mejor qué esperar y cómo proporcionar el cuidado adecuado.
Deben consultar a profesionales médicos, asistir a sesiones informativas y buscar recursos confiables en línea son formas efectivas de obtener información actualizada.
Así mismo, los cuidadores deben estar familiarizados con los medicamentos necesarios y sus posibles efectos secundarios.
Por lo tanto, deben asegurarse de seguir las instrucciones médicas y tener a mano cualquier medicamento necesario es esencial.
La administración correcta de medicamentos es crucial para el alivio del dolor y la comodidad del paciente, por lo tanto, es imprescindible llevar una bitácora para llevar el control de los horarios de las tomas de los medicamentos, su alimentación, los síntomas diarios y todos los datos relevantes sobre el día a día del paciente.
Además de la comprensión médica, los cuidadores también deben estar preparados emocionalmente para enfrentar los desafíos que conlleva el cuidado de un enfermo terminal.
Es por ello que lo recomendable es que se apoyen de preferencia en un profesional en este tipo de cuidados.
La presencia y el apoyo de un tanatólogo son de gran importancia en la vida de un cuidador primario
La ayuda de un Tanatólogo puede ser verdaderamente beneficiosa para el cuidador primario en varias formas, una de las más importantes es que este le puede brindar al cuidador de un enfermo un espacio seguro y confidencial para expresar sus emociones y procesar sus propias emociones.
Cuidar a una persona enferma o enfrentar la muerte de un ser querido puede ser extremadamente estresante emocionalmente y desgastante física y mentalmente.
El tanatólogo puede proporcionar una comprensión y empatía únicas, ayudando al cuidador a navegar por estas turbias aguas emocionales y a encontrar maneras saludables de lidiar con su propio dolor.
Ofreciendo técnicas y herramientas específicas para el autocuidado del cuidador y también para la familia.
Los cuidadores primarios se olvidan de cuidar de sí mismos mientras se centran en el bienestar de la persona a su cargo
Un especialista se encargará de enseñar al cuidador sobre la importancia de cuidarse a sí mismo física, emocional y mentalmente.
El tanatólogo le dará las estrategias para manejar el estrés, la ansiedad y la culpa que pueden surgir en este rol, así como sugerir actividades que ayuden al cuidador a relajarse y recargarse.
Proporcionará la orientación sobre cómo abordar temas difíciles, cómo expresar sentimientos y cómo resolver conflictos potenciales.
Esto puede mejorar la calidad de las relaciones y brindar un mayor apoyo emocional a ambas partes, debido a que el cuidador primario también debe lidiar con las personas cercanas al enfermo.
La presencia profesional y amigable de un tanatólogo puede marcar una gran diferencia en el bienestar y la capacidad de afrontamiento del cuidador primario durante estos momentos difíciles.
De esta manera los cuidadores primarios pueden tener una planificación anticipada y aprender a tomar las decisiones importantes que deben tomar junto con paciente terminal.
La comunicación es clave
En el cuidado de un enfermo terminal, la comunicación que debe tener el cuidador con su paciente es de vital importancia, ya que deben de establecer una comunicación abierta y honesta.
Tanto con el paciente, como con los miembros del primer círculo familiar y otros miembros del equipo de atención médica.
Es importante hablar sobre las preferencias del paciente en cuanto al cuidado, los deseos finales y cualquier preocupación o temor que puedan tener.
Esta comunicación abierta ayudará a garantizar que se estén cumpliendo las necesidades del paciente de manera adecuada.
Esto incluye discutir las preferencias de atención médica, como el uso de tratamientos paliativos, cuidados en casa o ingreso en un hospicio, así como la planificación de los deseos del paciente al final de su vida, como los arreglos funerarios y el legado que desean dejar.
Por lo tanto, los cuidadores primarios de un enfermo terminal necesitan estar bien informados, preparados emocionalmente y cuidar de sí mismos para poder brindar un cuidado de calidad al paciente.
Al comprender la naturaleza de la enfermedad terminal, buscar apoyo emocional, cuidar su propio bienestar y participar en la planificación anticipada, los cuidadores primarios pueden brindar un apoyo invaluable al paciente y ayudar a que su tiempo final sea lo más digno y cómodo posible.
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