Si al ver la lluvia
me añoras
Si al sentir el viento
mi aroma respiras,
Si al mirar la luna llena
derramas una lágrima,
Sabrás que…
aunque la vida nos separa,
lo que un día nos unió,
sí fue un gran amor.
Y lo sabrás porque yo,
así mismo lo siento,
aún siento tu aliento,
aún palpita tu amor,
pero es tanto el orgullo,
tanto el mío como el tuyo,
que cada cual, en su camino,
prefiere morir lento.
Inventándose romances, lastimando corazones.
¡Pobres almas perdidas!
sufriendo por cobardes.
La vida nos cobrará
el mal que nos hacemos,
y tantito peor aún,
al del corazón ajeno.
La vida como el amor,
no debe desperdiciarse,
habiendo tantas almas solitarias,
queriendo acariciarse.